La ciudad de San Diego anunció un retraso en la distribución de los nuevos contenedores de basura, parte del plan para modernizar el sistema de recolección.
Los antiguos botes negros serán reemplazados por contenedores grises y los de reciclaje azul por versiones más claras.
Hasta ahora, menos de la mitad de los 225 mil usuarios residenciales eligieron el tamaño de su nuevo bote. Quienes no lo hicieron recibirán automáticamente el de 95 galones, con un costo mensual de 43 dólares con 60 centavos.
Los residentes tendrán 30 días para solicitar un cambio de tamaño y recibir crédito en su factura del próximo año.
El Departamento de Servicios Ambientales informó que la entrega se realizará por fases hasta 2026.
Más detalles estarán disponibles esta semana en la página oficial del City of San Diego.










