Este martes el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, firmó un decreto para prohibir la comercialización de cigarros electrónicos, vaporizadores y cualquier producto similar, ya que las autoridades los consideran dañinos para la salud.
El argumento del gobierno federal es que los productos contienen químicos nocivos para el cuerpo humano y que las estrategias de mercadotecnia de estas compañías es captar a los jóvenes y adolescentes para inducirlos al vicio desde temprana edad.
Aunque su venta en México nunca estuvo autorizada o regulada, ahora con este decreto queda estrictamente prohibida su comercialización; una medida con la que comerciantes y consumidores de estos artículos no estuvieron de acuerdo en Tijuana.