En Bonita, la comunidad del Glen Abbey Memorial Park se enfrenta a un problema creciente: el robo de jarrones metálicos de las tumbas. Desde mediados de octubre, las piezas de metal han desaparecido, dejando a las familias angustiadas. Los jarrones, que tienen un valor estimado de mil dólares cada uno, probablemente están siendo robados para ser vendidos como chatarra.
El cementerio, que cuenta con una entrada privada, ha sido escenario de esta ola de robos, que ha dejado varios espacios vacíos en las tumbas. Algunas familias ya han comenzado a tomar medidas para evitar el robo, como asegurar los jarrones con cadenas.
Por otro lado, hay quienes piden una respuesta más contundente por parte de las autoridades y el cementerio, como la instalación de cámaras de seguridad para prevenir futuros robos y aumentar la protección de las tumbas.