Decretan toque de queda y despliegan más refuerzos para contener la emergencia
California | Los incendios forestales en Los Ángeles han cobrado la vida de 11 personas, mientras las llamas continúan arrasando más de 150 kilómetros cuadrados, equivalente a dos veces el tamaño de Manhattan. Miles de residentes han sido evacuados debido a la magnitud del desastre.
Las autoridades locales decretaron un toque de queda nocturno en las zonas afectadas, vigente de las 6 de la tarde a las 6 de la mañana, para garantizar la seguridad pública y evitar saqueos. Como medida adicional, se desplegó a la Guardia Nacional, y 20 personas han sido arrestadas por robos en viviendas dañadas.
El incendio de Pacific Palisades ha sido contenido en un 11%, mientras que el de Eaton alcanzó el 15% de control. Aunque son avances, los fuegos siguen activos y una nueva orden de evacuación fue emitida por la expansión del frente en Palisades hacia el noreste.
Miles de viviendas han sido destruidas en lo que las autoridades califican como uno de los desastres naturales más destructivos en la historia de Los Ángeles. Los esfuerzos continúan para sofocar las llamas y proteger a las comunidades afectadas.