La música, no solo transmite o potencializa nuestras emociones, también sirve como apoyo y fomento del respeto y la libertad.
El coro gay de Tijuana busca a través del canto romper con estigmas sociales sobre la comunidad LGBT+.
El primer coro de hombres gay se formó en San Francisco, Estados Unidos, en 1978 y al día de hoy existen cientos en diferentes partes del mundo con una única misión: hacer activismo a través de la música.
Edgar Gheno, director del coro y violista de profesión, compartió, para todos los interesados, que en este espacio la experiencia no es necesaria, siempre y cuando se cuente con las ganas de aprender y el tiempo necesario.
Este proyecto no solo busca desarrollar las habilidades artísticas de sus integrantes, sino que también se suma a trabajos comunitarios, poniendo el ejemplo y demostrando a la sociedad que la comunidad LGBT+ va más allá de lo que se puede ver en una marcha.
El coro gay de Tijuana se reúne de martes a jueves en la casa de la cultura con ensayos de 2 horas y siempre estarán gustosos de aceptar nuevos miembros.
