Una década depués dreamers siguen esperando una solución permanente de estatus migratorio.
Este 15 de junio se cumplieron 10 años del programa DACA, decreto que ha protegido de la deportación a más de 800,000 jóvenes que fueron traídos a Estados Unidos de forma irregular cuando eran niños.
“Las personas con DACA tienen autorización de estar aquí temporalmente, de obtener un permiso de trabajo lo que resulta también en tener un seguro social, licencia de manejar y acceso a muchos beneficios en el país” indicó Ana Acero, especialista en migración en Jewish Family Service.
Sin embargo, no les garantiza una estadía permanente en territorio estadounidense, ya que en cualquier momento el programa podría terminar y la vida de los miles de dreamers quedaría en el limbo.
“Depende de la administración que está de turno entonces el programa comenzó con el presidente Obama pero cuando la nueva administración asumió el poder en el 2017 lo primero que hizo fue la acción para terminar el programa entonces está pendiente de un hilo” señaló Veronica Ayesta del programa de educación superior de servicios legales en Jewish Family Service.
Quienes viven bajo el amparo del programa tienen que renovar su permiso cada dos años, y su miedo e incertidumbre se vuelve más grande cada vez que tienen que solicitar este trámite. Por esta razón organizaciones alzan la voz con mayor fuerza después de un década de promesas incumplidas, con la esperanza de haya un cambio.
“Varias Promesas han sido mencionadas, hubo varios intentos de tener una legislación que pasara para poder solucionar este tema, para dar un paso para que esta s personas puedan ajustar su estado pero aún no ha pasado”finalizó Ayesta.