San Diego | Dos exeducadoras que laboraban para Distrito Escolar Unificado de San Diego, Monika Hazel y Tavga Bustani, formalizaron esta semana una demanda contra el distrito escolar y el ex superintendente, Lamont Jackson, acusándolo de acoso, discriminación y represalias durante su gestión.
Hazel, quien trabajó durante años en el distrito, sostiene que Jackson la acosó sexualmente de forma reiterada, incluyendo tocamientos no deseados y propuestas sexuales. Según su denuncia presentada este lunes, el exsuperintendente le ofreció oportunidades de liderazgo a cambio de aceptar sus avances y, tras rechazarlos en 2022, fue degradada de su puesto.
Por su parte, Bustani afirma haber sido víctima de avances sexuales no deseados por parte de Jackson, incluyendo visitas sin invitación a su domicilio durante horas laborales mientras se encontraba enferma. También señala haber sufrido una degradación en su posición el año pasado.
Jackson fue despedido el pasado mes de agosto tras una revisión de la junta de educación que confirmó relatos creíbles de conducta inapropiada. El distrito informó este martes mediante un comunicado que revisará la demanda antes de tomar las acciones necesarias para salvaguardar sus intereses.
Ambas demandantes buscan una compensación económica no especificada por daños, gastos médicos y pérdida de ingresos, entre otros perjuicios.