En brazos de una de las agentes del Instituto Nacional de Migración y sin una silla adecuada para trasladarla en automóvil, finalmente fue llevada la bebé Valentina Sabean, del DIF en Tijuana donde permaneció ocho días, a la garita de San Ysidro para entregarla a las autoridades estadounidenses.
La pequeña quedó bajo resguardo del DIF tras el asesinato de su madre, Raquel Sabean, una veterana estadounidense, cuyo cuerpo fue localizado en Playas de Tijuana.
El principal sospechoso del feminicidio es Paul Wilson o Tyler Adams, pareja de la víctima y padre de la bebé; un sujeto que el FBI catalogó como peligroso.
La semana pasada fue detenido en Tijuana pero increíblemente, cuando fue deportado a Estados Unidos, burló a las autoridades con una identificación falsa y escapó.
Los familiares de la bebé Valentina tendrán que realizar el proceso ante las autoridades estadounidenses para recuperar su custodia. Y a la sociedad en general, tanto en México como en Estados Unidos se le pide reportar al 911 cualquier dato que ayude a capturar de nuevo al presunto culpable.
