San Diego – Varios legisladores de San Diego están promoviendo una iniciativa para penalizar el ‘hate litter’, es decir, la distribución de material odioso, como volantes y calcomanías, en lugares públicos. La propuesta se centra en casos donde estos materiales se dejan en parabrisas de automóviles, con el objetivo de frenar este tipo de discurso de odio.
La legislación ha ganado impulso en Sacramento, con apoyo bipartidista, y surge como respuesta al aumento de incidentes de ‘hate litter’, incluida la distribución de propaganda racista y antisemita.
Los defensores argumentan que estos materiales no solo propagan el odio, sino que también plantean preocupaciones ambientales y amenazan la seguridad pública. Si se aprueba, la ley facultaría a las autoridades a tomar medidas contra los responsables de ‘hate litter’, con posibles multas u otras sanciones.
La iniciativa ha captado la atención de varios medios de comunicación, destacando los esfuerzos para abordar el discurso de odio y promover el bienestar comunitario en California.
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