Corea del Sur — El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, declaró este martes la ley marcial de emergencia, otorgándole poderes extraordinarios, incluido el control de los medios de comunicación. La medida, sin precedentes desde la dictadura militar de los años 80, provocó protestas masivas frente a la Asamblea Nacional, donde manifestantes se enfrentaron a la policía mientras exigían el fin del decreto.
Yoon justificó la acción acusando a la oposición de planear una “insurgencia” y bloquear el funcionamiento del gobierno. Sin embargo, la Asamblea Nacional, controlada por la oposición, aprobó una resolución pidiendo el levantamiento inmediato de la ley marcial, mientras su líder, Lee Jae-myung, calificó la medida como una “traición al pueblo”.
Bajo el mando del general Park An-soo, la ley marcial en Corea del Sur prohíbe actividades políticas, reuniones ciudadanas y laborales, además de restringir la libertad de prensa, con amenazas de arrestos por “noticias falsas”.
La medida ha dividido al partido del presidente Yoon Suk Yeol, con críticas de su líder Han Dong-hoon, quien calificó la decisión como un error y prometió trabajar para detenerla.
