La Universidad de California enfrenta una demanda por presunta discriminación en admisiones, favoreciendo presuntamente a estudiantes afroamericanos y latinos sobre asiático-americanos y blancos. La demanda alega que esto viola una ley estatal de 1996, la 14ª Enmienda y el Título VI de la Ley de Derechos Civiles.
Los demandantes solicitan que la UC deje de preguntar sobre raza en sus solicitudes y que un monitor supervise el proceso de admisión en sus 10 campus. Hasta el momento, la universidad no ha emitido comentarios sobre la demanda.
El caso surge poco más de un año después de que la Corte Suprema de EE.UU. prohibiera la acción afirmativa en admisiones universitarias, obligando a las instituciones a replantear sus estrategias para la diversidad estudiantil. La demanda critica el sistema de evaluación “holístico” de la UC, acusándolo de priorizar criterios subjetivos sobre el mérito académico, lo que, según los denunciantes, perjudica a estudiantes de todas las razas.